Luis Aubele (Foto: Gabriela Valle)
http://www.lanacion.com.ar/997849
En la cara de la doctora Olivia Ogawa se dibuja una eterna sonrisa, donde se producen cambios muy sutiles, sobre todo en los labios y los ojos, según lo que narra. El nacimiento de su vocación fue a los 7 años, cuando Miti, su perrita ("perro perro"), tuvo un accidente. Fue entonces que decidió que sería médica, para curar a los demás. La ayudaron a seguir por ese camino su enriquecedora estada en Japón, donde trabajó dos años como interna en el hospital Imperial de Tokio, y sus experiencias tristes, como cuando visitó en Guatemala un centro de estudios sobre desnutrición y le mostraron cómo a una comunidad indígena se le suministraba un alimento creado en el instituto al que le faltaba un elemento, lo que impedía que los chicos alcanzaran una estatura adecuada. "Es un experimento", le informaron.
Otra experiencia significativa es la de haber rendido lo que le gusta llamar "la última materia". Ogawa nació en Buenos Aires, de padres japoneses, y se recibió de médica en la UBA. Al volver de Japón sufrió una crisis que la llevó a iniciar un peregrinaje, buscando respuestas por centros de salud de Gran Bretaña, Jamaica, Guatemala, Estados Unidos, la Argentina, e incorporar otras terapias: homeopatía, acupuntura, osteopatía, terapia ayurveda, etcétera. Todo, ahora está sintetizado en el Grupo de Estudio y Trabajo para la Salud (GETS), que desarrolla sus actividades en el Jardín Japonés de Buenos Aires.
-¿Cómo fue su experiencia en Japón?
-Aprendí varias cosas. En primer lugar, me enseñaron a trabajar y a comprender que podía ser médica clínica y, al mismo tiempo, investigadora. Que las dos ramas de la medicina no eran incompatibles; en cambio, en la Argentina era una cosa o la otra, no había alternativa. Además, y pese a que todos mis compañeros eran hombres, me respetaban y consideraban. Me di cuenta de que aunque había nacido en Buenos Aires, mis genes, heredados de mis padres, eran japoneses. Fue curioso, comprendí que el shinto estaba muy profundamente arraigado en mí.
-¿El shinto ?
- Shinto es una forma religiosa que no tiene fundador ni dogmas ni código moral precisos. Es esencialmente la expresión de una religiosidad natural. Desde siempre ha sido el fundamento de la espiritualidad y el comportamiento de los japoneses. Ha regido su postura ante la vida, su organización social, su estética, sus modales. Las virtudes básicas son honestidad, sinceridad, benevolencia, pureza interior, gratitud; el ideal es una actitud ante la vida tan limpia como la superficie de un espejo sagrado. Es lo que hace que un japonés sea japonés, y eso está en los genes y se hereda. Es yamato damashi , el espíritu nipón. Un japonés puede ser budista o cristiano, pero no deja de ser sintoísta.
-¿Qué es el Grupo de estudio y trabajo para la salud?
-Comencemos por observar las paradojas de nuestro tiempo: progreso científico y tecnológico; mayor expectativa de vida, pero al mismo tiempo aumento del estrés; deterioro de la calidad de vida; aparición precoz de enfermedades; etcétera. Ahora vayamos a lo que proponemos como grupo, a nuestra respuesta.
-¿Cuál es?
-Entendemos que la salud es un estado de armonía entre el cuerpo, las emociones y el intelecto con nuestro ser interno y el medio que nos rodea. Creemos que el principal factor desencadenante de todas las enfermedades es el alto nivel de estrés, y que la manera de normalizarlo es cambiando nuestro estilo de vida. Para nosotros, un estilo de vida óptimo tiene cuatro componentes básicos, que son las cuatro A : actitud ante la vida, alimentación, actividad física mental y lúdica, y ambiente. Una actitud ante la vida equilibrada y amorosa nos lleva a optimizar y a comprender las otras tres A, y a sentir respeto por nosotros y por todos los que somos parte integrante de la naturaleza, del planeta y del universo. La alimentación debe ser muy sana, lo menos tóxica posible, que aporte los nutrientes necesarios para una buena nutrición celular. Una actividad adecuada permite el libre fluir de la energía, tanto física como mental. La última A significa cuidar el medio ambiente tanto personal como familiar, comunitario, del planeta y del universo; tanto interno como externo. Algunos de estos principios están inspirados en la sabiduría japonesa. Por ejemplo, el método de las cinco S y los postulados del Kaizen .
- ¿Qué propone el método de las cinco S ?
- Seiri , orden; seiso , limpieza, eliminar lo innecesario; seiketsu , mantener el buen nivel; shitsuke , disciplina, y shutan , hábito o costumbre. Kaizen (mejora continua) sostiene que "las cosas simples son las que se pueden hacer mejor" y, por lo tanto, aconseja que más efectivo que hacer grandes cambios es hacer cambios más pequeños y permanentes.
- ¿A qué llama su "última materia"?
-Cuando hacía varios años que ejercía como médica me enfermé de tuberculosis y sólo entonces comprendí realmente lo que era estar enfermo. Uno de los peligros de nuestra profesión es tomar a los pacientes como si fuesen números o casos interesantes. En ese momento cambió mi visión y sentí que era una médica. Esa fue mi última materia.
- ¿Qué actividad lúdica practica usted?
-Soy tercer dan de karate, de la escuela Ryukyu. También me gusta el golf, pero lleva mucho tiempo y por ahora es imposible. Lo dejo para cuando me jubile ( ríe) .
